En unos días volaré a Praga, la ciudad en que nací. Viajaré allí para cumplir un sueño por el que he trabajado con amor y confianza durante los últimos meses.

Mi vida ha estado marcada por los viajes. Nací en Praga, crecí en la Habana, emigré a España. Por mi primer amor me fui a Argelia, por el siguiente amor viajé a Miami y luego al volver a España me di cuenta que el AMOR que siempre había deseado estaba más cerca de lo que imaginaba 🙂

Todos los viajes han dejado su huella, cada uno me ha mostrado una parte de mi camino, aunque en algunos me haya sentido completamente perdida 😉

Y es que, cuando emprendemos un viaje, nos abrimos a un nuevo mundo de posibilidades, de experiencias que tienen el poder de transformarnos por completo.

Los viajes de mi vida me han enseñado que:

Tesoro, déjate sorprender por el viaje de tu propia vida, sin apegarte a uno u otro camino. Todos los caminos de esta tierra terminan convergiendo en un mismo mar.

Date el permiso de ser auténtico, de sentirte vulnerable, de perderte para encontrarte.

No sabemos a dónde nos llevará la corriente de nuestros días, pero si estamos dispuestos a entregarnos a la sabiduría de la vida, si estamos dispuestos a actuar a pesar de nuestros miedos, si permitimos que todas las experiencias que nos sucedan en este viaje nos iluminen, si aceptamos nuestros aspectos más vulnerables; sentiremos que hemos encontrado lo que nos mueve y nos alienta, lo que nos hace celebrar, lo que nos enamora y apasiona de la vida, lo que nos permite que nuestra alma se encuentre en un estado infinito de agradecimiento y conexión con el universo.

Ahora es tu turno,

¿Qué lecciones te han enseñado los viajes de tu vida? Comparte tus experiencias en los comentarios!

Os envío todo mi amor, gracias por compartir la pasión

P.D- Pronto os contaré cuál es el sueño que voy a cumplir a mi ciudad natal…

2 comentarios

  1. precioso artículo querida Zuzel.

    Efectivamente la vida es un viaje apasionante. Todas y cada una de las experiencias de nuestra vida forman parte de ese viaje.

    Un abrazo

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